¡Excelso Secreto!

¡Excelso Secreto!

Excelso secreto,

semilla del camino,

amante de la más bella y curvada especie,

Afanada en renacer entre la muerte,

tumbada entre los abuelos, para inhalar el suspiro del ayer,

Instando al hombre a ofrendar sus horas, 

en cavar sobre los cabellos de las abuelas, 

para plantar el alma de la vida, 

en las tierras del tiempo, 

donde se mezcla, 

el aroma del viento, 

el calor del sol, 

la soledad de la luna, 

los cantos de la lluvia 

y la inspiración de la eternidad,
 para volver a decorar el rostro de la primavera.

Quién puedo ser yo, para exaltar mis ojos, por mis aspiraciones, en desmembrar mi cerebro, por descifrar códigos secretos, por anular mi alma, en explicar los misterios de la vida, por romper mis células, para encontrar los límites de la eternidad y por rendir mi vida a la muerte.

Cuando tu,

 EXCELSO SECRETO,

 amas las mañanas del campesino, 

cuando toma agua hervida, 

armonizada con hojas aromáticas, 

recién cortadas y perfumadas con el roció de la mañana, 

endulzada con el sudor de las abejas, 

observando como las brasas de la madera, 

endulzan los tamales de maíz, 

exprimiendo y evaporando el alma de la felicidad, 

decorando las paredes de tierra, 

con los sabores que la vida sabe ofrecer.